Bob Marley dijo: “Ella no es perfecta. Tú tampoco lo eres, y los dos
nunca seréis perfectos. Pero si ella puede hacerte reír al menos una
vez, te hace pensar dos veces, si admite ser humana y cometer errores,
no la dejes ir y dale lo mejor de ti. Ella no va a recitarte poesías, no
está pensando en ti en todo momento, pero te dará una parte de ella que
sabe que podrías romper. No la lastimes, no la cambies, y no esperes de
ella más de lo que puede darte. No analices. Sonríe cuando te haga
feliz, grita cuando te haga enfadar y extráñala cuando no esté. Ama con
todo tu ser cuando recibas su amor. Porque no existen las chicas
perfectas, pero siempre habrá una chica que es perfecta para ti…"
Elegí, que no quería otros abrazos, que no quería otras manos agarradas a
las mías, que no quería ver por la mañana otra cara que no fuese la
tuya, elegí llorar por ti de vez en cuando, elegí que tú fueras mi
locura y mi cordura, elegí llenar el silencio de la noche de nuestra
risa. Elegí las idas y venidas, las despedidas, elegí la impotencia, la
incertidumbre, elegí el miedo a fallar y los impulsos, elegí las
miradas, elegí temblar, elegí hacerme adicta a tus besos. Elegí
conservar intacto cada momento. Elegí que mi mayor hobbie era verte
reír, elegí no callarme nada, elegí darte todo, elegí hablar de nosotros
cuando hablaba de ti, elegí ser fuerte sin la ayuda de ningún tipo de
coraza y luchar por un solo motivo, elegí quedarme con tus manías y tus
defectos. Elegí estremecerme sola y únicamente con tus caricias, elegí
no ponernos límite. Elegí el sabor agridulce de las discusiones que
acababan en un abrazo, elegí derrumbarme cuando ya no aguantaba más.
Elegí arriesgar. Y no me arrepiento de nada.
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